Hoy que la lluvia nos acompaña desde buena mañana (me encantan los días así!!!!), llenando el aire de una viva quietud y las ramas de un verde intenso y un tranquilo piar de aves… me apetecía retomar un tema sobre el que ya estuve indagando tiempo atrás…
¿Alguna vez os habéis preguntado… qué diferencia hay entre un rayo y un relámpago? Una vez… una mente de esas inquietas y despiertas me planteó esa cuestión:
- ¿Es lo mismo rayo que relámpago?
¡Y de pronto todas las dudas acudieron a visitarme! ¡Nunca antes lo había pensado! Así que me puse a buscar y rebuscar información al respecto y así averigüé que si bien es verdad que coloquialmente se utilizan como sinónimos… en realidad no son lo mismo, aunque si están asociados.
Uno de los motivos de que se produzcan las tormentas eléctricas, es que el aire no es un buen conductor de la electricidad, es un buen aislante por lo tanto, sin embargo… cuando esa electricidad se acumula y supera cierto valor límite, se produce una masiva descarga eléctrica, que son los rayos (los cuales, en realidad están constituidos por una secuencia muy rápida de descargas sucesivas a través del mismo canal). Pero… ¿cómo se producen los rayos en sí? Al parecer, dentro de los nubarrones, la turbulencia generada por el aire que sube produce la colisión entre pequeños cristales de hielo y gotas de agua (llamados "hidrometeoros"). Por causas no completamente entendidas, las cargas eléctricas positivas se acumulan en las partículas más pequeñas, mientras que las cargas negativas se localizan en las partículas más grandes. El viento y la gravedad son quienes separan a los hidrometeoros eléctricamente cargados, lo que produce esa enorme diferencia de potencial eléctrico dentro de la tormenta que al final dan lugar a los rayos. Algo así:
(ya sabemos… que los polos opuestos tienden a atraerse de alguna manera!!)
El aumento de temperatura en los puntos por donde pasa la descarga (hasta un valor cercano a 30.000 ºC) y el brusco aumento de presión debido al calentamiento asociado generan una gran luminosidad, tratándose ésta vez del relámpago.
Si tuviéramos que explicarlo de una manera más sencilla y menos exacta, podríamos decir que el rayo es la descarga eléctrica en si (como cuando a veces tocas la tele encendida y te da una pequeña descarga… pero a lo bestia) y el relámpago es el “resplandor vivísimo e instantáneo producido en las nubes por una descarga eléctrica” (RAE).
Pero si pensábamos que aquí se terminaban las curiosidades sobre los relámpagos… ¡estábamos muy desencaminados! Es lo que tiene investigar ;-) Y es que resulta que también hay diferentes tipos de relámpagos: el silencioso, el negro, el tubular, el serpenteante, el estratosférico, el chorro azul… entre otros, pero hay uno que me llamó especialmente la atención. Se trata del relámpago bola, una forma muy curiosa y poco corriente de descarga eléctrica. Se presenta en forma de esfera luminosa, llegando a alcanzar el tamaño de una pelota de fútbol. En algunas ocasiones aparecen varios de ellos formando como un rosario o sarta de perlas. Éste fenómeno no es muy conocido, pero se cree que se produce cuando una zona del canal o guía se ioniza más que el resto, lo que la hace más brillante. Su origen parece estar originado con concentraciones de ozono o de nitrógeno. Según testigos oculares, el rayo de bola se mueve lentamente en la atmósfera, como flotando. El soplo de aire más ligero basta para hacerlos oscilar. Unas veces desaparecen repentinamente, con un gran estallido, y otras se esfuman silenciosamente, sin dejar huellas de su paso. Si logran penetrar en un edificio recorren las diversas estancias hasta que, al tropezar con algún obstáculo, estallan con gran estruendo. Otras veces suelen caer al suelo y botan, disminuyendo de volumen a cada contacto con el mismo. ¡¡¡Y pueden durar hasta minutos!!!
Aquí dejo alguna fotillo:
¿Habíais visto algo así? Por último, una curiosidad más de todas las que existen al respecto… ¿Sabíais que científicos de la NASA han descubierto que hay zonas del mundo mucho más propensas a las caídas de rayos?
“Un relámpago. Evita el océano pero le gusta Florida. Es atraído por los Himalayas y, más aún, por África Central. Y, además, los relámpagos casi nunca caen sobre los polos norte o sur”- afirman en uno de sus estudios y añaden las zonas costeras como menos propensas a los rayos en otros… ¡Pero quizá este mapa significativo nos lo deje algo más claro!
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