Por si pensábamos que únicamente en la antigüedad se creía que ésta planta era especial hasta el punto de hacerle un hueco en mitos y leyendas o que las mismísima Cleopatra lo utilizara como crema hidratante… tal vez os interese saber que actualmente el aceite de sésamo es considerado como un excelente aceite de masaje, facial y corporal para todo tipo de pieles, además se utiliza en la fabricación de jabones, productos farmacéuticos, cosméticos y lubricantes. Y si a alguien le quedaba alguna duda de la importancia que sigue teniendo en nuestros días… ¡aquí dejamos algo para deleitarse los sentidos!
ALGUNAS RECETAS CON SESAMO:
Tahin (Manteca de sésamo)
Tostar ½ kilo de sésamo blanco en una sartén sin añadir aceite. Enfriar y batir añadiendo agua a temperatura ambiente que haya sido hervida previamente y sal (o sin sal, vamos…al gusto) hasta obtener una pasta consistente. Envasar en frasco de vidrio y guardar siempre en el frigorífico.
Leche de sésamo
Moler ¼ de una taza de sésamo blanco en un molinillo. Agregar ½ litro de agua y licuar bien ambos ingredientes. Dejar macerar unas 3 horas, luego filtrar y endulzar si se desea. Otro sistema consiste en mezclar en licuadora una taza de tahin con dos tazas de agua.
Bechamel sin lácteos ni harinas
Colocar el tahin en un cazo. Agregar agua caliente y remover hasta lograr la consistencia deseada. Condimentar con nuez moscada y sal marina al gusto.
Galletas de avena y sésamo
350g de tahin, 150g de azúcar integral, 150g de semillas de girasol peladas, 6 cucharadas de ralladura de limón, 350g de harina de avena, 2 cucharadas de semillas de sésamo.
Mezclar en un cuenco el tahin y el azúcar; añadir las semillas de girasol y la ralladura de limón. Incorporar la avena, agregando agua hasta obtener una masa fluida y ligera. Aceitar una bandeja de horno, disponer montoncitos de masa con ayuda de una cuchara, presionar ligeramente, espolvorear con las semillas de sésamo y hornear de 15 a 20’ en horno mediano.
Paté de garbanzos (Hummus)
Batir hasta lograr una pasta homogénea: 300g de garbanzos cocidos, 1 cucharadas de tahin o manteca de sésamo, 1 dientes de ajo, 1 pizca de comino molido, un trocito de cebolla, 1 rama de perejil picado, 1 cucharada de pimentón, jugo de medio limón, un buen chorro de aceite de oliva y agua.
Fuentes:
Libro: The 150 Healthiest foods on earth (Jonny Bowden)
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