Hace ya bastantes meses, un buen amigo me descubrió una de esas maravillas que está ahí, en la naturaleza, dispuesta a despertarnos una sonrisa ^_^
No sé si alguna vez habéis oído hablar del “rayo verde”. No, no es el último fichaje del “Rayo” ni nada que se le parezca!! Aunque bien valdría de apodo!! ;-)
El “rayo verde” es un fenómeno bastante raro que se produce en la naturaleza y que tal vez ahora que llegan las vacaciones, mas de un@ tenga la suerte de poder disfrutar!! Y es que seguro que en algún momento todos hemos visto un atardecer de esos majestuosos, capaces de dejarnos con la boca abierta, tiñéndolo todo con sus luces naranjas, rojizas, violetas… :-)
Pues bien… durante el atardecer, en lugares de costa, con el cielo totalmente despejado, claro, sin brumas… es posible ver un breve destello verde claro, como una linea verde, cruzando el horizonte a modo de despedida del sol. Algo como lo que aparece en las fotos:
¿Alguna vez habéis podido observarlo? Al parecer, es un efecto producido por la refracción de la luz sobre la atmósfera.
El aire al ser más denso cerca de la superficie, hace que los rayos sigan una trayectoria que se deforma levemente, siguiendo la curvatura de la Tierra. Los rayos de una frecuencia más alta (colores verde y azul) se curvan más que los de frecuencias más bajas (rojos y naranjas), por lo que los rayos de color verde del extremo superior del Sol continúan siendo visibles por unos momentos, mientras que los rayos solares de frecuencia más baja han sido ocultados por la curvatura terrestre. Es más… en algunas ocasiones más excepcionales aun, se afirma que puede verse tras el rayo verde un brevísimo rayo azul e incluso uno violeta también.
Que el día que observemos el atardecer tenga un cielo despejado, aumenta también las probabilidades de observar un rayo verde, ya que las condiciones meteorológicas favorecen la inversión térmica, aumentando las diferencias de densidad y amplificando el efecto óptico de refracción.
El reflejo del agua ayuda además a magnificar el destello del rayo verde, y por eso también es conveniente que el mar esté totalmente calmo para poder apreciar este raro y hermoso fenómeno…
Seguro que estamos de acuerdo en que el mar siempre tiene algo seductor, hipnotizador, que consigue tenernos enganchados… viendo su ir y venir misterioso y fascinante durante minutos sin que a veces nos demos ni cuenta del tiempo que ha transcurrido! :-) Hm! No sé si la leyenda que cuenta Julio Verne en su libro “Rayo Verde” será cierta… No sé si es verdad que quien consiga ver uno de esos rayos verdes al atardecer será capaz por fin de ver en su corazón y en el de los demás y comprenderlos… pero tal vez ahora tengamos un motivo más para dejarnos invadir de otro modo por su belleza y las maravillas naturales que nos rodean ;-)
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